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El Generalife de la Alhambra. El lugar del retiro del sultán

El Generalife es un extraordinario y bello espacio situado en el conjunto palatino de la Alhambra formado por el denominado Palacio del Generalife y por sus jardines altos y bajos. Se concibió como lugar de retiro y de placer para el sultán. En el Generalife el monarca podía apartarse de los asuntos de gobierno y así sentir la paz que transmiten los sonidos del agua y los olores de los jardines. Toda una casa de campo para el recreo, pero también para la ganadería, la agricultura y como coto de caza.

Qué significa el término “Generalife”

Aún hoy en día sigue a debate el origen del término “Generalife”. La interpretación más aceptada sobre su nombre es la que proviene de las palabras árabes Yannat al-Arif, que significa “Jardín del Arquitecto”; otros opinan que el significado exacto era “el más excelso jardín”. En cualquier caso, son nombres muy evocadores para uno de los más bellos lugares que ha construido el ser humano.

El Generalife está concebido como la almunia del sultán. En época nazarí las almunias eran casas de campo de las familias nobles donde se retiraban a descansar. Las almunias solían tener un palacete y estaban rodeadas de bellos jardines y tierras para el cultivo.

Dónde está situado y como se llega

El Generalife está ubicado al pie de una elevación montañosa que se llama Cerro del Sol. Es un recinto independiente separado de la Alhambra por el Barranco de la Cuesta de los Chinos, pero su visita es conjunta con la Alhambra. Aunque el Generalife se ubica fuera de la muralla del conjunto palatino, su construcción se realizó muy cerca, para que el sultán pudiera trasladarse siempre que quisiera

El acceso al Generalife se realiza desde los denominados Jardines Nuevos y el Paseo de los Cipreses. Estos espacios formados por cipreses fueron creados en 1931 por el arquitecto Francisco Prieto Moreno para recrear de manera magnífica los jardines hispanomusulmanes de la época.

Acceso al Generalife desde la Alhambra

Si estamos en el interior de la Alhambra realizando la visita, tenemos dos formas de llegar al Generalife:

  • Cuando salimos de la visita a los Palacios Nazaríes atravesaremos los Jardines del Partal y seguiremos por el denominado Paseo de las Torres hasta llegar al Paseo de los Cipreses, que nos conducirán a los Jardines Nuevos.
  • Si nos encontramos dentro de la Alhambra, pero fuera del recinto de los Palacios Nazaríes, deberemos seguir la Calle Real de la Alhambra que parte desde la Puerta del Vino y el Palacio de Carlos V. En determinado momento del trayecto nos pedirán que mostremos las entradas antes de continuar por el Palacio de los Abencerrajes y la Medina. Este camino conduce al Generalife.
Alhambra desde los Jardines Bajos del Generalife
Bonita panorámica de la Alhambra y Granada desde los Jardines Bajos del Generalife

En ambos casos no se tarda mucho en llegar, aunque dependerá del ritmo. La distancia entre la Alhambra y el Generalife es de menos de un kilómetro si partimos desde el punto más lejano, es decir, la Puerta del Vino. Se suele tardar unos 15 minutos.

Horarios de visita

Los horarios de visita a la Alhambra son los siguientes:

  • Horario de invierno (15 de octubre a 31 de marzo): 8:30 – 18:30 (De lunes a domingo).
  • Horario de verano (1 de abril a 14 de octubre): 8:30 – 20:00 (De lunes a domingo).

Horario nocturno de Jardines y Palacio del Generalife:

  • 1 de abril – 31 de mayo: 22:00 – 23:30 (De martes a sábado).
  • 1 de septiembre – 14 de octubre: 22:00 – 23:30 (De martes a sábado).
  • 15 de octubre – 14 de noviembre: 20:00 – 21:30 (De viernes a sábado).

Si quieres saber los horarios de taquillas para las entradas, así como como los horarios nocturnos de visita a la Alhambra, en el siguiente artículo tienes toda la información detallada:

¿Cuánto tiempo se tarda en visitar el Generalife?

Normalmente, en visitar el Generalife se tarde 1 hora, aunque dependerá de muchos factores, como el grado de interés o si vamos acompañados de un guía. Tendrás que tenerlo en cuenta para organizar el resto de visita a la Alhambra.

Entradas y precios

Las modalidades de entradas a la Alhambra que incluyen el Generalife son los siguientes:

Entradas y precios para la visita nocturna al Generalife:

Si quieres conocer todas las modalidades de entradas que podemos adquirir para la Alhambra y sus precios, el siguiente artículo te proporciona toda la información:

Guía oficial para la Alhambra y el Generalife

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Historia del Generalife

El Generalife, al igual que la Alhambra, es un espacio que se va formando a lo largo de los siglos mediante las sucesivas iniciativas de los diferentes sultanes. Los elementos decorativos más antiguos nos dan una pista del origen de este lugar. Los especialistas están de acuerdo que comenzó a construirse a finales del siglo XIII y su primer promotor fue el sultán Muhammad II (1273 – 1302). Más adelante, hacia 1319, fue reformado por Ismail I, pero también se han observado intervenciones durante el reinado de Muhammad V, el constructor del Palacio de los Leones. La última reforma de época nazarí la realizó Yusuf III en el sector sur del palacio.

¿Cómo era el Generalife en época islámica?

Los sultanes y la nobleza disponían de almunias y grandes fincas dispersas por todo el territorio que tenían un carácter eminentemente rustico. Las funciones principales tenían que ver con la explotación agrícola y ganadera, pero también con el ocio, recreo y descanso de su propietario. Podemos imaginar que los alrededores de la ciudad disponía de un cinturón verde compuesto por almunias. El Generalife fue durante muchos siglos la más importante del reino y la más cercana a la Alhambra.

Siguiendo los documentos de la época donde se describen varias de estas almunias, podemos hacernos una idea de cómo sería el Generalife en época nazarí. Parece ser que tanto los cultivos, jardines y edificaciones no aparecieron hasta que se abrió la Acequia Real, que surtiría de agua a todo el lugar. Durante décadas se fue configurando la almunia del sultán, apareciendo vastos jardines y espesos bosques que la rodeaban y que eran patrimonio particular del monarca. Se ha confirmado que el Generalife dispuso de, al menos, cuatro huertas y un palacio con ricas decoraciones epigráficas cuyo elemento central era el actual Patio de la Acequia. Es muy posible que adosado al palacio habría unos baños y construcciones de carácter defensivo. En el interior del edificio palatino habría más jardines y todo el recinto estaría rodeado de las huertas.

El Generalife tras la conquista cristiana

Cuando los Reyes Católicos conquistaron Granada en 1492 cedieron el Generalife a varios comendadores del reino como forma de compensarlos por sus servicios. La almunia del sultán fue pasando por varias manos hasta que en 1539 pasó a ser propiedad de Pedro de Granada Venegas, cabeza de una ilustre familia de moriscos conversos. En 1555 consiguieron la alcaldía en perpetuidad y la tenencia de la finca para los herederos de esta familia por real cédula de Felipe II.

Mirador musulmán en el Patio de la Acequia del Generalife
Mirador musulmán en el Patio de la Acequia del Palacio del Generalife

Aquí comenzaría un largo pleito por la propiedad del Generalife que enfrentaría al estado español contra los marqueses de Campotéjar, herederos del linaje Granada-Venegas. Los litigios comenzaron en 1826, en el reinado de Fernando VII, y duraron casi un siglo. Finalmente, en 1921, tras incontables recursos y procedimientos, se llegó a un acuerdo extrajudicial por el cual la familia cedía su propiedad y el Generalife se incorporaba al patrimonio nacional. Se unificó su gestión con el de la Alhambra a través del Patronado de la Alhambra y el Generalife.

Alhambra y Generalife, patrimonio de la humanidad

El último episodio histórico del Generalife se produjo un 2 de noviembre de 1984, cuando el comité de la UNESCO procedió de manera oficial a inscribir en la lista a la Alhambra y el Generalife de Granada como lugares patrimonio de la humanidad.

Visita virtual al Generalife: un recorrido por su palacios, jardines y espacios que lo componen

Nuestra visita comienza por los denominados Jardines Nuevos que nos conducen al interior del recinto.

Los jardines Nuevos

Los Jardines Nuevos es lo primero que vemos al entrar al Generalife. Tienen un estilo jardín-laberinto rodeados de arquerías de rosales y cipreses, con calles escoltadas con pérgolas y una acequia en crucero. En la parte central hay una alberca donde flotan nenúfares. Y para completar esta bella estampa, se encuentran fuentes insertadas alrededor, siempre con las hermosas vistas de la Alhambra acompañándonos durante el recorrido.

El Jardín Nuevo ha sido fruto de diversas intervenciones arquitectónicas que dieron comienzo en 1931. En estos jardines está el teatro al aire libre que acoge todos los años el Festival Internacional de Música y Danza de Granada

La Acequia Real en los Jardines Bajos del Generalife
La Acequia Real en los Jardines Nuevos del Generalife

Las huertas

Desde los Jardines Nuevos ya vamos visualizando las huertas del Generalife. En ellas los agricultores musulmanes cultivaban todo tipo de productos (legumbres y hortalizas, granados, sandías, melones, limones, melocotones, plátanos, moras, espinacas, alcachofas, almendras, plantas aromáticas, azafrán…) que iban a parar a las despensas del sultán. Era todo un lujo disponer de esta gran variedad de productos, algo que solo el monarca nazarí podía permitirse.

Huertas del Generalife con la Alhambra y Granada de fondo
Huertas del Generalife. VER TODAS LAS FOTOS DEL GENERALIFE

Los agricultores musulmanes eran verdaderos expertos en la agricultura de regadío y tras la conquista cristiana los moriscos siguieron empleando sus técnicas. Hoy en día las huertas del Generalife nos siguen proporcionando alimentos frescos y variados como ajos, habas, lechugas, tomates, patatas, garbanzos, calabazas y muchos más.

Palacio del Generalife

Palacio del Generalife de la Alhambra
Palacio del Generalife en la Alhambra. Foto del Patio de la Acequiar con el mirador cristiano en la izquierda

Entramos por la puerta del Palacio del Generalife. Encima de esta puerta está una llave, símbolo de la dinastía nazarí y que nos da la bienvenida al Palacio. En su parte exterior, el Palacio tiene un curioso aspecto rural que no se corresponde a la majestuosidad del Generalife; pero este elemento rural desaparece cuando nos introducimos en su interior. El acceso a dos patios a diferente nivel lo asemeja al acceso a la Alhambra. Todas las dependencias rodean un patio con dos pórticos de arcos que se denomina Patio de la Acequia.

Patio de la Acequia

El Patio de la Acequia es el maravilloso jardín oculto del Palacio. Lo atraviesa la Acequia Real de la Alhambra, que a su paso riega los 4 parterres de plantas. Era uno de los lugares más íntimos del sultán dentro del Generalife. Su estructura original fue diferente a la actual. En este jardín privado del monarca se cultivaron arrayanes, jazmines y rosales que escondían el patio.

Solo un pequeño mirador sobresalía del muro, por donde el monarca nazarí divisaba el paisaje. En tiempos de los Reyes Católicos fue reformado el lateral del patio convirtiéndolo en una galería mirador. Los famosos surtidores de agua cruzados fueron instalados durante el siglo XIX.

Patio del Ciprés de la Sultana

Continuamos nuestro recorrido por el Patio del Ciprés de la Sultana, nombre que se lo da a un ciprés seco de 100 años que allí se encuentra y una inscripción que cuenta la leyenda de los encuentros entre un noble abencerraje y la sultana. Mientras recorremos el patio escucharemos el rumor del agua que sale de los surtidores proveniente de la Acequia Real que entra por el patio. Es un jardín que ha sido modificado en numerosas ocasiones por los marqueses de Campotéjar, que eran anteriormente propietarios del Generalife.

Patio de la Sultana en el Generalife
Foto del Patio de la Sultana en el Generalife

Jardines Altos

Subimos una empinada cuesta para llegar a los Jardines Altos, jardines distribuidos en diferentes paratas que tienen su origen en el siglo XIX. Su estilo romántico es innegable. Aquí encontraremos fascinantes y bellísimos magnolios y árboles de hoja perenne y caduca, y un pequeño jardín botánico, sello romántico del lugar. Estos jardines, junto al Palacio de Carlos V, representan el elemento renacentista de la Alhambra.

Foto de los Jardines del Generalife
Fuente en los Jardines Altos del Generalife

La Escalera del Agua

Seguimos el recorrido por otras de las maravillas del lugar: la Escalera del Agua, utilizada para subir a la parte más alta del Generalife. Las escaleras están cubiertas por bóvedas de laurel y el agua baja por el pasamanos de la escalera a ambos lados. El visitante podrá escuchar el sonido relajante de ambos canales, pero también sentir el frío del agua en sus dedos mientras sube la escalinata. Toda una arquitectura hecha para los sentidos. Subir por la Escalera del Agua es toda una experiencia que tuvo el privilegio de vivir el poeta Antonio Machado:

Hablan las aguas y lloran, bajo las adelfas blancas; bajo las adelfas rosas, lloran las aguas y cantan, por el arrayán en flor, sobre las aguas opacas.

Escalera del Agua en el Palacio del Generalife de la Alhambra
Detalle de la Escalera del Agua. La Alhambra es una experiencia que se visita con los cinco sentidos

Mirador Romántico

Tras la subida de la Escalera del Agua llegamos al punto más alto del Generalife donde se sitúa el Mirador Romántico. No se puede describir con palabras la sensación que producen las vistas desde el mirador. Hay que vivirlo. Podemos decir que la vista panorámica es inigualable. El mirador es de estilo neogótico y fue construido en el siglo XIX por los marqueses de Campotéjar, antiguos propietarios del Generalife. Se cree que debajo de este mirador están los restos de un oratorio musulmán, aunque aún no se han hecho excavaciones arqueológicas para demostrarlo.

Mirador Romántico en el Generalife
Mirador Romántico del Generalife

Paseo de las Adelfas

El recorrido va llegando a su fin, pero aún nos quedan varias cosas por ver. Una de ellas es el Paseo de las Adelfas. Es un sendero que recorre la parte superior del muro que separa de las huertas, y que nos conduce de nuevo al lugar por donde hemos entrado, ya que el recorrido de la visita al Generalife es circular. Se llama así porque todo el camino está cubierto por una bóveda de adelfas. Es otra de las construcciones románticas del Generalife realizadas en el siglo XIX.

Paseo de los cipreses

El Paseo de las adelfas conduce al Paseo de los Cipreses, donde estos árboles nos van a escoltar hasta la salida del recinto. Fue también construido durante el siglo XIX y en él se ha descubierto recientemente un tramo de la Acequia Real nazarí, que se puede ver.

Paseo de los Cipreses en el Generalife
Paseo de los Cipreses. VER TODAS LAS FOTOS DEL GENERALIFE

Teatro del Generalife

Teatro del Generalife de la Alhambra
Teatro del Generalife de la Alhambra. El escenario de cipreses es único

Llegamos un poco cansados al final, pero fascinados por la belleza del lugar. El teatro del Generalife es lo primero y lo último que vemos en el recorrido. El teatro se inauguró en 1954 y su forma arquitectónica se inspira en la disposición del clásico riad nazarí. Ha sufrido diversas reformas para adecuarlo al Festival Internacional de Música y Danza de Granada. El escenario está rodeado de una pantalla de cipreses que constituye un fondo escénico inédito en los teatros contemporáneos.

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